Deseos

He intentado muchas veces hacer crecer los árboles al revés, que las raíces salieran de la tierra y sealzaran mientras las hojas siguieran enterradas. De vez en cuando intento congelar el agua del mar y cuando me entesto soy capaz de estarme días enteros intentando hacer correr el tiempo hacia atrás, volver niños los viejos, bebés los niños, adolescentes los adultos. Nunca lo consigo. Siempre he creído que algún día conseguiría volar sin ninguna ayuda, respirar bajo el agua y memorizar los libros tal y como los leía. No son sueños. Alguna vez he intentado hacer llover rosas del cielo y acercar el sol a la tierra. He querido viajar tan solo de pensarlo, ver allá dónde hay oscuridad y escuchar a kilómetros de distancia. He escogido invertir mi tiempo en buscar el buen humor de la gente y la certeza de la inteligencia. Siempre he fracasado. Si nunca ha habido alguien que creía poder parar las balas y hacer revivir a los muertos, éste he sido yo. He querido poder pintar el aire, hacer sonar las montañas y exprimir las piedras ara sacarles todo el jugo. He querido parar los objetos para que dejaran de caer siempre hacia la tierra. Lo he querido con todas mis fuerzas, y nunca, nunca he conseguido ni la más mínima recompensa. Y al fin, cansado de todo estos esfuerzos, vi que no podría hacer nunca nada de todo eso y lo único que intenté fue que me entendieseis. Y evidentemente... tampoco lo conseguí.

Ivan

Racional y sentimental. Difícil elección, difícil conjunto, difícil de soportarme. Aprendiz cada día. Siempre lo intento. No quiero tristeza. Ni mía ni tuya. Sonrisa. Aprender. Mañana más fácil que hoy. Mañana sí. Hasta mañana.

Gràcia y centro

Esta mañana he ido a dar una vuelta por las calles de Gracia. Hacía mucho tiempo que no me dejaba caer por allá. Las últimas veces siempre ha sido por la noche y ya no es el mismo. Hoy cuando me he levantado hacía buen día y algo de calor. Como con este tiempo imprevisible nunca se sabe cuando puede durar, he querido aprovecharlo e ir a leer a alguna plaza con un café con leche en un mano y el libro en la otra.
He cogido un autobús que me ha dejado bastante arriba. Me gusta ir bajando por las calles estrechas pero luminosas de Gràcia sin ninguna dirección prevista, tan solos esperando que las plazas aparezcan ante mí como oasis en el desierto. He estado basante rato andando y escuchando la tranquilidad de las calles. Tras leer un rato y comerme dos empanadas criollas (buenísimas por cierto...) he ido bajando en dirección al Paseo de Gracia. Antes de llegar, me he metido en un jardín de un interior de isla que hacía tiempo que tenía fijado y que ha sido ideal para acabar de meterme de nuevo en mi lectura. Cuando la barriga ya me pedía que era la hora de comer, me he dirigido hacia casa por el paseo. Y realmente ha sido lo peor del día. Si a 10 de abril ya está pleno de guiris hasta arriba, haciendo fotos a todas las casas posibles, saltándose el semáforo en rojo de la calle Aragón y haciendo del centro de Barcelona un tipo de Port Aventura, no quiero ni pensar cómo será este verano si añadimos toda la historia del Forum. Me gusta la diversidad de Barcelona, tener tantos ambientes diferentes tan cerca pero definitivamente, me quedo con las calles y plazas de Gracia una mañana de sábado a las grandes calles céntricas. Aunque soy consciente de que las noche son otra cosa...

Amén!

Lo tengo que confesar: a mí las procesiones de semana santa me dan miedo. Mira, no puedo hacer más, toda esa gente disfrazada con las túnicas y máscaras, todo el mundo tan serio y como enfadados, esas figuras trágicas y oscuras, las velas, los golpes de bastón, la música tétrica, esos cantos rotos... Que no, que no, que me coge canguelo. Que no veo por ninguna parte el sentido religioso a todo esto, que como teatro para acojonar a la gente es perfecto pero no veo que la penitencia que se hace allá tenga ningún tipo de sentido.
Yo que ya soy de clase atea, cada vez que veo este tipo de cosas mas lejos de la iglesia y todo lo que la rodea que me siento. Que no, tú, que a mí me gusta la luz, la música agradable, que la gente ría. Y todas estas historias no veo que hagan a la gente mejor, ni más feliz ni nada de nada. Y si la excusa tiene que ser la tradición, tampoco me sirve porque hay tradiciones que más valdría que fueran desapareciendo. Lo que menos me gusta de todo esto se que se haga de una forma tan pública. Quiero decir, a veces he visto rituales masones y tienen ciertos parecidos con respecto a símbolos y parafernalia. Pero no he sentido el mismo escalofrío como delante de esas enormes carrozas que se pasean por las calles. Los que comparten la masonería, lo hacen de forma privada y en casa de cada cual todos somos libres de hacer lo que queramos. No veo que esos vengan a pasarme sus rituales por delante. En cambio esta tarde, iba paseando por el gótico cuando he querido ir a parar a la rambla. Pero no he podido llegar porque todo un grupo de capirotes estaban plantados en el cruce de mi calle con la rambla y tenían aparcada la carroza justo en el medio. Yo no he querido meterme por ahí, bastante canguelo me producía todo aquello, así que he dado media vuelta y he girado por otra calle intentando rodearlos. Pero he llegado a un lugar dónde la calle que he tomado también acababa en un carroza y por detrás mío empezaba a sentir el ruido de los tambores y los pasos. Había bastante lugar para pasar por el lado de la carroza y adelantar toda la procesión y poder así seguir paseando tranquilo. Pero no he podido, cuando he intentado andar hacia delante un hombre malcarado y supongo que de la cofradía me ha largado: "Ande vas? por aquí no pasas. Te esperas a que pase toda la procesión" mientras me enseñaba un bastón, que no dudo que hubiera usado si intentaba llevarle la contraria. A ver... mi primera reacción ha sido reír ( al hombre no le ha hecho demasiada gracia) y le he preguntado porque no podía pasar si ellos estaban parados. "Porque no" ha sido su respuesta. Que más que una procesión, parecía una manifestación cortando la Diagonal. Quizás se estaban quejando de algo y yo no me he enterado. Así que ya me veía tragándome toda la historia esta porque las calles ahora se ve que son sólo para las procesiones.
Por suerte, he podido meterme dentro de una cafetería que había a mis espaldas. De hecho, la pasta que me he comido mientras leía y por la puerta iba entrando ese olor a incienso de las procesiones, ha sido de lo mejor de la tarde. Todavía le tendré que agradecer al señor y hacerle un ofrenda...

Quiero

Quiero ver más películas, quiero leer más libros, quiero hablar más lenguas, quiero probar nuevos sabores, quiero mirar más rostros, quiero ir más en bici, quiero hacer miles de fotos, quiero explicar centenares de cuentos, quiero saber hacer música, quiero escribir sin cesar, quiero llenar de notas mi libreta, quiero pisar todos los rincones de Barcelona, quiero probar todos los cafés del mundo, quiero sentirme más fuerte y ligero, quiero pisar más veces la arena de la playa con los pies desnudos, quiero ver las cestrellas y la luna más a menudo, quiero nadar, quiero cortarme el pelo y volver a tenerlo largo, quiero reír sin cesar, a todas horas, quiero dar abrazos, quiero verte ya y darte mil besos, quiero leerte mil poemas de Mario, quiero ver salir y esconderse el sol, quiero estirarme en la hierba y escuchar el sonido de los árboles, quiero asistir a más conferencias, quiero comer más ensaimadas, quiero lavarme los dientes tres veces cada día, quiero tener mi gata conmigo, quiero escribir más cartas, quiero descubrir más restaurantes escondidos contigo, quiero visitar a los amigos más a menudo, quiero aprobarlo todo y ser un buen farmacéutico, quiero saber más de lo que sé, quiero ir a más museos, quiero saber cocinar, quiero comer más fruta, quiero saber dibujar, quiero mirar más obras de arte, quiero ir más al teatro, quiero bailar más, quiero escuchar más música, quiero saber recordar, quiero tener mejor memoria, quiero hacerme más agujeros en las orejas, quiero conocer a mas gente que valga la pena, quiero ser un poco más yo cada día.

Y volver, volver, volver...

Bueno, pues ya volvemos a estar en Barna. Una semanita que me ha pasado volando pero me lo he pasado teta. He estado en Lisboa, ya se que marché sin despedirme pero bueno, ahora ya vuelvo. Muy guapa la ciudad, cierto aspecto de estar todo a medias y muchos conductores locos. He ido a ver un amigo que hace un Erasmus allá y realmente, viven muy bien estos erasmus... Ahora a descansar y estudiar hasta el miércoles.